Curso de Geofísica analizó impactos del cambio climático basado en que la Tierra es un sistema vivo

Profesores y profesoras de física actualizan conocimientos sobre fenómenos naturales

La Tierra es un sistema muy similar a alguna forma de vida que la habite, pues nació y morirá, se autorregula, requiere energía para mantenerse y ésta la intercambia con el medio externo o entre sus subsistemas, que también se relacionan y condicionan buscando permanentemente el equilibrio. Así se podría concluir tras las clases dictadas esta semana por académicos y académicas de Geofísica de la Universidad de Concepción, en el marco del curso para profesores de enseñanza básica y secundaria “Física de la Atmósfera, el Océano y la Tierra Sólida”.

            En la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, que cobija a Geofísica, se ha desarrollado esta iniciativa gratuita que es parte de la Escuela de Verano 2019 de la UdeC. Allí participan 34 docentes de diversos colegios, principalmente de la Región del Bío Bío.

            La sugerencia filosófica de que la Tierra es muy similar o igual a un organismo vivo es de la hipótesis Gaia, ideada por el químico James Lovelock en 1969​ -aunque publicada en 1979-, siendo apoyada y extendida por la bióloga Lynn Margulis. Y quien la destacó en el curso fue el académico Aldo Montecinos, quien expuso acerca de los Fundamentos de la Física del Clima 1: Balance de Energía, mostrando que el sistema climático ya está siendo afectado por el cambio global. Y este criterio se puede extrapolar a otras charlas desarrolladas durante esta semana, como por ejemplo la del docente Juan Inzunza, quien se refirió a la Circulación de la Atmósfera, quizás en una coincidencia no prevista con uno de los aparatos del cuerpo humano. Lo mismo en el caso de la Circulación Oceánica, del investigador Oscar Pizarro.

            También se expuso acerca de modelos y pronósticos oceánicos y meteorológicos, que buscan conocer comportamientos repetitivos de sub sistemas de la Tierra, basados en ciertas leyes físicas más o menos complejas, con lo que se puede llegar a conocer su comportamiento futuro. Siempre considerando las diferentes escalas de análisis en sus sentidos temporales (días o siglos, por ejemplo) y espaciales (100 metros o 10 mil kilómetros, por ejemplo). Así lo describieron los académicos Andrés Sepúlveda y Martín Jacques.

            Algunos elementos claves para este pronóstico futuro tienen que ver con el cambio climático, fundamentalmente en el clima, el océano y en los seres vivos que lo habitan. “Uno de los enigmas más importantes por conocer es cuál será el comportamiento del agua por efecto del cambio climático, considerando el agua en sus estados sólido, líquido y gaseoso. Es un aspecto clave para saber qué efectos tendrá el cambio climático”, destacó Montecinos, climatólogo y doctor en oceanografía.

            El agua tiene mucha relación con la interconexión de los subsistemas de la Tierra. Así por ejemplo, el doctor en oceanografía Oscar Pizarro destacó que el cambio climático ya está reduciendo las tasas de ingreso de aguas superficiales de los océanos hacia sus profundidades, lo que es clave en los actuales equilibrios climatológicos por efecto de la regulación de la temperatura mundial que realizan los mares. O más específicamente para Chile, la sequedad ascendente del centro sur del país ya se ve incluso en los modelos optimistas acerca de los impactos próximos del cambio climático, comentó el doctor en ciencias del clima Martín Jacques.

            Lo cierto es que estudios recientes hacen indesmentible el impacto de la actividad humana en el calentamiento del planeta, expresaron los académicos expositores que se refirieron al tema, lo que podría también interpretarse como un aumento de fiebre de la Tierra. “Hay un desbalance de temperatura”, explicó Montecinos. Y necesita enfriar su fiebre. Si el ser humano no es capaz de reducir los gases de efecto invernadero que hacen aumentar la temperatura, posiblemente la Tierra busque alguna fórmula para volver al equilibrio. ¿Cómo lo hará? “Lo que es claro es que la Tierra ya ha tenido altas temperaturas y se las ha arreglado para volver a sus ciclos naturales”, comentó el investigador de la UdeC. El problema sería si el ser humano es capaz de adaptarse tanto a la fiebre como a los cambios para retornar al equilibrio.

Dr. Oscar Pizarro Arriagada dictó la clase “Fundamentos de la física del clima: circulación oceánica”, además de ser el coordinador del curso
Palabras de bienvenida del decano, Dr. Roberto Riquelme Sepúlveda.
El Dr. Dante Figueroa Martínez inició el curso con el tema “Fundamentos de la geofísica”.
La visión acerca de la Tierra como un sistema vivo fue resaltada por el Dr. Aldo Montecinos Gula, al dictar la clase “Fundamentos de la física del clima 1: balance de energía”.
El Dr. Juan Inzunza Bustos dictó las clases “Fundamentos de la física del clima 2: circulación de la atmósfera” y “Meteorología y climatología de Chile”.
“Modelos y pronósticos meteorológicos”, fue el área tratada con los profesores de física por el Dr. Martín Jacques Coper.
El taller de tsunami fue dirigido por la Dra. Ignacia Calisto Burgos, quien además dicto la clase “Tsunami”.
La Dra. Carolina Parada Véliz dictó la clase “Biogeoquímica del océano y paleoclima”.
“Modelos y pronósticos oceánicos” fue la clase ofrecida por el Dr. Andrés Sepúlveda Allende.
El Dr. Marcos Moreno Switt ofreció tras clases: “Introducción a la tectónica de placas”, “Terremotos en Chile” y Ciclos sísmicos de grandes terremotos”.
“Gerofísica aplicada” fue la última clase del curso, dictada por el Dr. Arturo Belmonte Villanueva.