Investigadora Ilaria Tabone es coautora del artículo “Antarctic tipping points triggered by the mid-Pliocene warm climate”.
Resumen libre del paper:
Científicos han recurrido al análisis del clima cálido de mediados del Plioceno, hace entre 3,3 y 3 millones de años, para entender cómo podría comportarse la capa de hielo antártica en el futuro. En esa época, los niveles de CO2 eran similares a los actuales, pero las temperaturas globales eran entre 2,5 y 4 grados más altas, lo que provocó un aumento del nivel del mar de entre 5 y 25 metros.
Para que se produzca un aumento del nivel del mar superior a los 10 metros, se necesitaría no sólo el colapso de la capa de hielo de la Antártida Occidental, sino también una reducción de la capa oriental.
El estudio, que utilizó un modelo avanzado de dinámica de hielo, muestra que la capa de hielo de la Antártida Occidental colapsaría con un aumento de la temperatura oceánica de sólo 0,5 grados, mientras que la cuenca Wilkes retrocedería significativamente con un calentamiento oceánico de 3 grados. El glaciar Totten, en cambio, apenas mostraría signos de retroceso en condiciones extremas.
Las simulaciones predicen un aumento del nivel del mar de entre 2,7 y 8,9 metros, donde los extremos superiores ocurrirían con el retroceso sustancial de la capa oriental. Los investigadores concluyen que un moderado aumento de las temperaturas oceánicas es suficiente para desencadenar estos cambios, sin que sea necesaria la inestabilidad de los acantilados de hielo.